jueves, 3 de noviembre de 2011

HAITÍ ROTO



Más de un año después del terremoto que asolo Haití y que afectó a más de dos millones de personas, el panorama no ha cambiado demasiado.


Las calles de Puerto Principe siguen repletas de edificios en ruinas, los escombros inundan la capital y los haitianos se mueren de hambre y enfermedades. A día de hoy, todavía no se ha empezado casi a realizar trabajos de reconstrucción. Sin ir mas lejos, el Palacio Presidencial o la catedtal siguen en el mismo estado que minutos después del seísmo. Casi un millón y medio de personas viven en condiciones infrahumanas, sin casa, sin trabajo, con unas condiciones higiénico-sanitarias inexistentes y lo peor de todo sin posibilidades de que esto cambie ni a medio ni siquiera a largo plazo.

Gracias a la colaboración de las ONG's muchas de estas personas tiene una posibilidad de poder seguir viviendo. Mensajeros de la Paz con el padre Ángel a la cabeza, mantiene a día de hoy los proyectos que iniciaron después del terremoto. Así pues sigue manteniendo la atención a los damnificados en campamentos de desplazados ubicados en los alrededores de Puerto Principe que dan cobijo, alimentación y servicios básicos a cientos de familias que perdieron su hogar. Uno de los campamentos, situado en la zona de Tabarré agrupa a más de 1200 personas en sus instalaciones.

Este campamento se originó entre los habitantes de Puerto Principe, la destruida capital de Haití, que se agruparon en solares desocupados, careciendo de todo tipo de medios, materiales e infraestructuras higiénico sanitarias.

En Tabarré Mensajeros de la Paz suministra alimentos y materiales básicos, así como cobijo en pequeñas casas prefabricadas en madera, hace bien poco han conseguido llevar una potabilizadora de agua que proporciona agua potable no solo a las personas que habitan en el campamento sino también a los habitantes de toda la zona.

También se ocupan de la creación y mantenimiento de un centro de día para personas mayores con capacidad para 100 plazas, conscientes de que uno de los sectores mas olvidados por el desastre son los mayores que estan sufriendo la marginación que esta provocando que este colectivo carezca de recursos y no tengan ningún tipo de apoyo o supervisión. El centro de día atiendea ancianos que proceden del barrio de Tabarré y que se encuentran en situación de necesidad económica, desamparo social o desnutrición. Allí tienen acceso a alimentación, terapia ocupacional, actividades lúsicas, servicios de aseo e higiene, salas de juegos, entretenimientos y apoyo social.

Haití no tiene Registro Civil, ni Registro de la Propiedad, acaban de estrenar Gobierno con un nuevo presidente, pero tenemos que ser conscientes de la verdadera situación por la que siguen atravesando: el pueblo haitiano tiene hambre, se muere de cólera y de malaria. Tenemos que continuar manteniendo nuestra solidaridad, esa que nos convirtió en uno de los primeros y principales países en ayudarlos.

No podemos dejar pasar la oportunidad de seguir auxiliando a un pueblo que nos necesita.

HAITÍ...¿Y AHORA QUÉ?
Donaciones:
Fundación Infancia de Hoy
La caixa 2100 2908 95 0200114508

1 comentario:

  1. Es una pena.Al principio todos nos volcamos con las catastrofes y al poco nos olvidamos

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